Rejuvenecimiento de manos y cuello
¿Qué es el rejuvenecimiento de manos y cuello con ácido hialurónico?
El rejuvenecimiento de manos y cuello con ácido hialurónico se realiza aplicando pequeñas dosis de ácido hialurónico bajo la piel del cuello y la cara dorsal de las manos para combatir las imperfecciones y arrugas causadas por el envejecimiento de la piel y el deterioro cutáneo de estas partes del cuerpo. Con esta técnica se consigue devolver el rejuvenecimiento a las manos y el cuello para que recuperen la vitalidad y tengan un aspecto joven y radiante.
Tratamiento
La técnica de rejuvenecimiento de manos y cuello con ácido hialurónico consiste en inyectar ácido hialurónico en puntos determinados previamente estudiados individualmente para las necesidades específicas del paciente. Con estas microinyecciones se consigue hidratar las zonas tratadas y recuperar una piel tersa y radiante para darle a las manos y al cuello un aspecto de juventud y vitalidad.
Los tratamientos de rejuvenecimiento de manos y cuello con ácido hialurónico son totalmente inofensivos, ya que no son nada invasivos y no producen dolor alguno al paciente. Estos tratamientos son muy eficaces, pues en una sola sesión ambulatoria de pocos minutos se logra, sin necesidad de cirugía ni anestesia, un resultado inmediato totalmente visible que dura aproximadamente 9 meses a 1 año.
Son en total 3 sesiones al año dependiendo de la calidad de la piel y de los resultados deseados, puede que se necesite más de 3 sesiones.
Beneficios
- No requiere cirugía ni anestesia.
- Se realiza en breves sesiones ambulatorias.
- Resulta totalmente indoloro y nada invasivo.
- No causa efectos adversos.
- Ofrece un efecto inmediato y muy duraderos (alrededor de un año).
- Corrige y previene las marcas de edad derivadas del envejecimiento de la piel en manos y cuello.
- Tensa la piel y hace que luzca más luminosa, radiante y juvenil.
- Aumenta la autoestima y la confianza del paciente en sí mismo.
Postratamiento
El rejuvenecimiento de manos y cuello con ácido hialurónico, al igual que el resto de los tratamientos que implican inyectar este tipo de sustancia, no necesita cuidados especiales tras el tratamiento, salvo evitar el roce de la zona con otras superficies para no desplazar el ácido inyectado.
